MADRID, LA "CAPI" DEL VINO

| nº 176 | mayo 2019

Durante noventa minutos, las ciento veinte parejas inscritas, probamos a ciegas siete vinos diferentes

Hace unas semanas, tuvimos la fortuna de acudir al Concurso de Cata por Parejas que todos los años organiza Vila Viniteca de manera alterna en Madrid y Barcelona. Tras la baja a última hora, por motivos laborales, de mi pareja habitual, el gran Iban Mate, fue otro buen amigo quien le suplió, el no menos grande Kike García. Nos acompañó también nuestro querido Joxemi Ayerbe, excelente compañero de vivencias vinícolas desde hace muchos años.

Llegamos a Madrid el sábado a mediodía y aprovechamos para dar un abrazo a nuestros amigos Iñaki y Delia de La Fisna, lugar de visita obligada para todo amante del vino que visite la capital. La Venencia es otro de esos lugares de culto donde me gusta llevar a todo aquel que desconoce sus encantos. Tendríais que haber visto la cara de Kike al entrar por la puerta y encontrarse con aquel panorama. Tan sólo por eso mereció la pena. Pero prefiero no desvelar aquí sus secretos. Me lo agradeceréis al visitarla en futuras ocasiones.

Terminamos nuestro periplo vinícola de sábado en el local que, desde mi punto de vista, ofrece la mejor selección de vinos de toda la ciudad. Los hermanos Mario y David Villalón, inauguraron hace unos pocos años Angelita. En muy poco tiempo se han convertido en lugar de referencia y reunión de enófilos y frikis del vino en la ciudad. Allí nos encontramos con un buen número de amigos, entre ellos Natxo Pistacho, legazpiarra de pura cepa, exiliado en Barcelona, bohemio del vino y creador del riquísimo rosado mallorquín Moteur Pistache Rosé 2017, quien nos desveló nuevas elaboraciones que os mostraremos en ESSENCIA en un futuro cercano. Estuvimos también con Juancho Asenjo, grande entre los grandes, maestro de maestros, con quien pasamos unas apasionantes horas charlando de vino, historia y política entre buenas botellas de vino.

Tras levantarnos el Domingo con algo de pereza después de una víspera agitada, llegamos al Casino de Madrid, lugar donde se celebró el evento. Durante noventa minutos, las ciento veinte parejas inscritas, probamos a ciegas siete vinos diferentes y, tras discernir y llegar a un acuerdo entre ambos, debíamos aportar la siguiente información de cada uno de los vinos: país, región, denominación de origen, añada, variedad o variedades de uva, productor o bodega y nombre del vino. Casi nada oiga.

Los vinos catados a ciegas y descubiertos tras el concurso fueron: Didier Dagueneau Pouilly-Fumé Silex 2015 del Valle de Loira, Rafael Palacios Louro 2017 de Valdeorras, Bride Valley Vineyard Blanc de Blancs 2014 del sur de Inglaterra, Gonet-Medeville Blanc de Noirs 1er Cru Brut de Champagne, Quiñón de Valmira 2016 de Rioja y Sassicaia 2014 de Bolgheri. Destacaron, sin lugar a dudas, Bride Valley 2014, vibrante y delicioso y el italiano Sassicaia 2014, profundo y complejísimo.