PERFUMES NICHO Y VINOS CON ESENCIA

| nº 120 | jul 2014

"Una experiencia única y pionera que fusiona la personalidad del vino con el arte del perfume, poniendo a prueba tus sentidos"

Con esta frase resumen los chicos de Liquid Experiences (www.liquidexperiences.net), el carácter del evento que tuvo lugar el pasado 30 de Mayo en el Hotel de Londres.

Maddalen Marzol, de Perfumería Urbieta y el que aquí escribe fuimos los encargados de dirigir la original sesión.

Una semana antes de la cata, nos juntamos en Perfumería Urbieta para seleccionar los perfumes que íbamos a asociar a cada vino. Lo primero, conviene aclarar que no se trata de una perfumería cualquiera. La verdad es que me siento totalmente identificado con la labor que realizan. En sus estanterías se encuentran tan sólo perfumes denominados "nicho", es decir, perfumes de pequeñas producciones y que no gastan un duro en publicidad sino en excelente materia prima. Auténticas y exquisitas obras de arte tan sólo comparables con los aromas supremos que desprenden los mejores vinos. La experiencia de testar estos divinos frascos a través de los conocimientos de Maddalen resultó sumamente gratificante. Tras una intensa tarde dimos con las medias naranjas para cada uno de los vinos propuestos:

- Jean Paul Deville Carte Noire (A.O.C. Champagne) y L'Eau des Hesperides de Diptyque

- La Bota de Manzanilla nº42 (D.O. Manzanilla de Sanlúcar) y Aura Maris de Lorenzo Villoresi

- André Scherer Gewürztraminer Grand Cru Eichberg 2011 (A.O.C. Alsace) y Une Rose de Editions de Parfums Frederic Malle

- Miros Colección Privada 2006 (D.O. Ribera del Duero) y Amber Oud by Kilian

- Eric Bordelet Poiré Authentic (Normandía) y Petite Cherie de Annick Goutal

Durante la cata en el Hotel Londres disfruté como un niño con las explicaciones de Maddalen, así como con el resultado de la armonía entre vinos y perfumes. Aún así, me sedujeron especialmente dos de los emparejamientos. Por un lado, el carácter salino y yodado de La Bota de Manzanilla Nº42 que sintonizaba de manera sorprendente con la personalidad marina del perfume de Lorenzo Villoresi. ¿Acaso se inspiraría en los vinos de Sanlúcar para crear su obra?. Por otro lado, la deliciosa paleta aromática del Amber Oud, casaba de manera brillante con el Miros Colección. El Oud es una madera altamente cotizada por los perfumistas debido a su finura aromática. En este caso, el perfume se mostraba casi como una película de suspense, con música vibrante de fondo, en un ambiente oscuro, tenso, penetrante. Me pareció inquietantemente delicioso.

Por cierto, os recomiendo que echéis un vistazo al genial blog de Maddalen, El tocador de Dorothy, donde como podéis suponer, el mundo del perfume es el principal protagonista.

Por último, no queda más que agradecer la iniciativa de Liquid Experiences, formado por jóvenes emprendedores de Mondragón Unibertsitatea.