HAU DA GURE SAGARDO BERRIA !

Porque es un placer arrancar el nuevo año acercándonos a una de las tradiciones más singulares que tenemos en esta tierra. Porque el grito de “txotx” significa mucho más que una llamada a la kupela para degustar un vaso de sidra de la nueva temporada.

Por eso me encanta el mes de Enero. Por tener la oportunidad de disfrutar de la apertura oficial; la primera y más famosa es la de Astigarraga pero también podemos vivirla en Hernani, Usurbil, Navarra, Bizkaia, Araba e Iparralde. Gure Sagardo berriaren Eguna.

En Astigarraga hay un ritual que se repite año tras año: la plantación de un nuevo manzano en el manzanal de Sagardoetxea, un acto simbólico que nos recuerda la renovación de la naturaleza. Se ha unido a la celebración hace unos años la llamada de los txalapartaris para bailar la sagar dantza (en la fotografía) y la invitación de los sidreros al homenajeado de ese año a formar parte de la soka dantza para abrir la kupela. Recuperar las raíces de la sidra. Ese es el objetivo.

Los orígenes son inciertos, y las teorías de su procedencia son diversas. Algunas aseguran que fue importada por los árabes, otras que los vascos aprendieron de los romanos el arte de elaborarla y las hay que afirman que en Euskadi se consumía antes de la llegada de estas civilizaciones. En el siglo XX, hubo un descenso de la producción pero la elaboración se mantuvo en Gipuzkoa.

“Tierra frondosa y montuosa, desolada de pan y vino y de todos los alimentos corporales, aunque abastecida de manzana, sidra y leche”. Así describía, en el año 1143 el País Vasco el viajero Aimeric Picaud.

Casi nueve siglos después y gracias al trabajo de nuestros sagardogiles, la visita a las sidrerías se ha transformado, de forma natural, en una experiencia cultural y gastronómica que gusta tanto a locales como a visitantes.

Cita ideal para reunirse y pasar un buen rato en un entorno que invita a cantar, a compartir, a socializar, a cambiar el móvil por el vaso y brindar. Txoootxxx!

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