BERA-BERA: CALIDAD POR DENTRO Y POR FUERA

La pandemia del Coronavirus ha obligado en muchas ocasiones a “reinventarse” a empresas y negocios. Esa palabra que vamos a gastar por el excesivo uso no siempre es negativa. De hecho, hay lugares que han terminado ganando, como es el caso del Bera-Bera, el restaurante del Hotel  Palacio de Aiete, que ha salido ganando al instalar una terraza exterior con la que la clientela está encantada.

Ya son unos añitos los que Javier Penas e Izaskun Gurrutxaga llevan dirigiendo este magnífico restaurante, pero hasta ahora no se habían planteado la necesidad de contar con una terraza para servir comidas. Y es que hasta la fecha la gente principalmente utilizaba el interior de los restaurantes para comer. Incluso en el anterior establecimiento que gestionó esta pareja, el Olentzo de Zizurkil, no contaban con terraza exterior a pesar de haber podido tenerla, y bien hermosa, porque la gente optaba por comer en el interior. 

Pero la irrupción del Covid-19 ha cambiado nuestras costumbres, y uno de los reflejos más claros es el de la costumbre de comer en el interior. Hay, por parte de no pocas personas, un miedo, a veces injustificado, a comer en el interior de los restaurantes y los locales que cuentan con terraza están siendo más solicitados que los que no. Y decimos que dicho miedo está injustificado, porque la hostelería es, precisamente, el gremio en el que más escrupulosamente se están cumpliendo los protocolos de seguridad e higiene, ya que es, para bien o para mal, el uno de los sectores más vigilados por las autoridades sanitarias.

Nueva terraza y reformas

Así, pues, desde su apertura hace ya casi un mes, Javi e Izaskun se plantearon el instalar una buena terraza, y lo han conseguido, contando además con la excelente actitud de la dirección del hotel, que además de no cobrarles la rente en los meses del confinamiento, ha colaborado realizando una serie de reformas en el restaurante e iluminando la terraza de manera que ésta puede ser también utilizada de noche, momento en el que cuenta con una iluminación suave y acogedora que convierte el lugar, si cabe, en un espacio todavía más atractivo y acogedor del que ya es de día. Izaskun y Javi, por supuesto, están enormemente agradecidos a los gestores del hotel por su comprensión, algo que no ha tenido todo el mundo y en todas partes.

Una degustación guiada por el sabor

En cuanto a la oferta gastronómica de este restaurante, ésta sigue siendo una de las más remarcables de la ciudad tanto por la calidad del género empleado como por la buena mano de Javier Penas, que ya pinta canas en esto de dar de comer, y bien, al hambriento. La cocina de Javi es una cocina tradicional impecable, de manual, con salsas elaboradas con tiempo y cariño, fondos, cocciones impecables y, sobre todo, sabor, mucho sabor.

Lo demostraron las Croquetas de cortesía (Foto 1) con las que abrimos nuestra degustación (de jamón, de hongos y de patatas a la riojana) y lo demostraron las apetitosas gambas de Huelva (Foto 2) finas, sutiles, en su punto perfecto con las que continuó el festín. Estas gambas, de hecho, son acarreadas directametne desde Andalucía por un cuñado de Izaskun, con lo que la calidad del género está más que garantizada.

Siguieron dos sorprendentes entrantes: unas apetitosas y carnosas almejas acompañadas de un perfecto y denso pil-pil (Foto 3) y un meloso revuelto de hongos con jamón (Foto 4) terriblemente original, tanto por la forma de presentar el jamón como una fina lámina sobre el revuelto, como por el toque colorista y original que le aportaba el tomate concassé que presenta en su base. 

Seguimos con un espléndido rodaballo (Foto 5), género que hay que solicitar por encargo en caso de querer comerlo entero, pero que casi siempre está disponible por raciones, al igual que la merluza fresca, el rape, el cogote... Javi tiene aquí fé ciega en Pescados Iñaki, de Pasaia, que negocia directamente con los barcos pesqueros, con lo que la frescura y la calidad del género es excepcional. En cualquier caso, el pescado se trata con auténtica maestría en casa de Javi e Izaskun, al igual que la carne, como demostró tanto el fundente Rabo al vino tinto (Foto 6) como la extraordinaria Chuleta de viejo (Foto 7) que coronó el menú antes de abandonarnos al placer dulce con unos Canutillos de tiramisú (Foto 8) que sólo pueden definirse como de auténtico vicio.y una Tarta de queso con intxaursaltsa que nos trasladó a los sabores de nuestra infancia dejándonos unas terribles ganas de volver a abandonarnos en las manos de esta acogedora y muy profesional pareja.

Sin duda, quien prueba el Bera-Bera, repite, porque aquí la cuestión realmente no es el disponer o no de terraza, sino su calidad, que la encontramos, sí o sí, estemos en el interior o en el exterior. ¡Nos encanta este sitio!.

RESTAURANTE BERA BERA

Goiko Galtzara Berri, 27 (Hotel Palacio de Aiete) - DONOSTIA-SAN SEBASTIÁN
Tf: 943 22 42 60