ES DE BIEN NACIDO SER AGRADECIDO
Creo que a todos nos llega un momento en la vida en el que nos ponemos a reflexionar sobre lo que somos, lo que hemos sido y lo que queremos ser. Ha llegado el momento de dar gracias a todas esas personas que han estado en mi vida (como coctelero). Para mí un cóctel no es un “trago” que se bebe y ya está, para mí un coctel tiene un significado, una experiencia, y si somos más “filosóficos” como dice mi buen amigo Sergio Calvo de Brandtenders.news: “Para entender el corazón y la mente de una persona, no te fijes en su indumentaria, sino en qué come y qué cócteles bebe”.
Como no, a mi padre, ya que con él desde pequeñito aprendí sin saberlo el arte de la mezcla, pero de esto os hablaré en otro artículo, eso sí, os adelanto que con él aprendí el ancestral método de maceración. Otra persona que para mí fue una revolución, fue Pepe Dioni. Sin su presión en el día a día, sin su perseverancia, no me hubiera obligado a irme a estudiar a las mejores escuelas de coctelería, tanto nacionales como internacionales.
En esos estudios he encontrado personas que me han marcado como coctelero y como persona, como es Patxi Troitiño, con el cual coincidí años como hostelero, pero no como coctelero, y cuando ya he tenido la oportunidad de estar con el cómo coctelero la evolución ha sido increíble. Una evolución no se puede dar sin una base, la cual fue dada por Damia Mula, en el CETT de Barcelona, quien me abrió la visión, el espíritu creador y me descubrió un mundo que para mí es el futuro. Y cómo me voy a olvidar de ti, del gran intelecto de la coctelería, tú has sido y seras mi gran revolucionador, y como tal me niego a revelar tu nombre, pues sé que te gusta estar en el anonimato siempre y cuanto te ponga un buen Negroni. Todos ellos y algunos más, son personas que han influido en mi manera de ver la coctelería, aunque si soy sincero, necesitaría media revista para dar agradecimientos, o más bien un libro entero, jejeje.
Y cómo no voy a dar gracias a Josema y Ritxar (he de confesar que ninguna de las fotos de mis artículos son suyas, ya que si lo fueran, serían mucho mejores!!) por la oportunidad de expresarme libremente, sin tabúes, y dejando que hoy escriba un artículo como éste, que quizás no entendáis por qué lo escribo, pero sé que en el futuro lo haréis, pues considero que el hacer de una persona y cómo lo hace depende de muchísimas cosas, entre ellas de las personas que le han ayudado, enseñado y apoyado.
Y por último, y no menos importante, ni muchísimo menos, alguien que ha influido en mí ha sido Félix Manso, que no sólo ha creído en mí, sino que me ha retado continuamente para sacar cócteles que en la vida me hubiera imaginado sacar, como es el de hoy, una deconstrucción de un plato asiático, como es el pato a la naranja.
ORIENTE Y OCCIDENTE
INGREDIENTES:
- 4 cl Ysabel Regina
- 2 cl Finesse Orange Marie Brizard
- 8 cl Zumo de naranja natural
- 1.5 cl Vinagre de arroz integral con mandarina
- 1.5 cl Clara de huevo
- Crujiente de pato y arroz negro
ELABORACIÓN:
Introducimos todos los ingredientes en la coctelera salvo el crujiente de pato, y sin añadir el hielo agitamos fuertemente para que nos emulsione nuestra mezcla (en coctelería, esto se llama hacer un “Dry Shake”). Posteriormente, añadimos hielo, volvemos a agitar y servimos. Para finalizar, decoraremos con nuestro crujiente de pato y arroz negro.
ARTE LÍQUIDO!
ALBERTO BENEDICTO
Especialista en coctelería
www.aquavitaecocktails.com/