¿SUPERPROTEÍNA?
La proteína es un nutriente en alza. Le ha llegado su turno en esto de las modas. En los 90 se hablaba del horror de las grasas, desde los 2000 el miedo a los hidratos de carbono con el azúcar a la cabeza ha corrido como la pólvora entre la sociedad, y así hemos llegado al siguiente macronutriente de moda: la superproteína, al que le añadimos todo tipo de alabanzas y la industria alimentaria ha descubierto en ellas un reclamo para vender todo tipo de comestibles.
¿Pero qué hay de verdad en todo esto?
La proteína es necesaria y forma parte de nuestra dieta saludable. La ingesta media de proteína que actualmente tomamos está muy por encima de los límites recomendados, que están fijados en el 15% de la energía total, según se desprende del estudio científico ANIBES coordinado por la Fundación Española de la Nutrición (FEN) y publicado en la revista “Nutrients”.
Nuestra fuente de consumo de proteína más habitual es de origen animal: carne, pescado, huevos, lácteos (leche, yogures, queso...). Dicho esto en una población sin un requerimiento especial de proteína no hay que caer en la tentación de comprar alimentos enriquecidos con proteína por mucho que la industria nos haga caer en la necesidad de tomar yogures enriquecidos con proteína, galletas enriquecidas con proteína.... hay que hacer caso omiso de estos cantos de sirena.
La fuente de proteína animal está muy presente en nuestra alimentación. Sería muy recomendable cambiar parte de nuestra proteína animal por proteína vegetal. Para ello hay muchas opciones pero mi favorita, y a la que yo llamaría “superalimento”, son las legumbres, que además nos aportan fibra, vitamina y minerales.
Y si ahora que llega el verano pensar en un plato de legumbres te hace sudar, puedes comerlas como hummus, ensaladas, cremas...
DIETÉTICA
y alimentación
Carolina Rïn
Dietista Colegiada nº 1887