MESAS VACÍAS
El “No show”, forma como se conoce internacionalemente a la práctica, a veces consciente y malintencionada, de realizar una reserva en un restaurante y no presentarse a cubrir la misma ha saltado al candelero a lo largo del último mes debido al pleito mantenido por un notario bizkaitarra contra el restauante Amelia de Donostia que cobró al “despistado” cliente la friolera de 510 euros por no haber avisado de la cancelación de su reserva. Un juzgado de primera instancia dio finalmente la razón al restaurante con lo que el demandante no solo no recuperó el dinero cobrado sino que tuvo que asumir las costas del juicio. Este hecho ha hecho surgir otro debate, el de la conveniencia de que al hacer una reserva se exija un adelanto del coste de la misma que no sería devuelto en el caso en el que el cliente no acudiera y no avisara sobre su renuncia a la reserva.
Más allá de la cantidad abonada por el protagonista de la anécdota, que ha ocupado a veces el centro del debate, ha quedado claro que la mayoría de los hosteros y, nos atrevemos a decir, el público en general, aprueban la medida ya que a un restaurante le supone un gran problema esta lacra que a veces alcanza proporciones insospechadas. En no pocas ocasiones los hosteleros y restauradores han tenido que rechazar grupos de clientes al tener todas las mesas reservadas y cuando son conscientes de que algunas de ellas van a quedarse vacantes por la no afluencia del reservante, ya es demasiado tarde para suplirlo por otro, con lo que el restaurador pierde lo que hubiera ingresado por la mesa, cuando no todavía más porque hay ocasiones en las que incluso hacen compras de más o contratan personal extra para atender a reservas que se quedan al final en agua de borrajas.
En este ejemplar de Ondojan.com hemos hecho una encuesta a varios hosteleros y hosteleras que, en muchos casos, no ven muy clara la implantación de una fianza al hacer la reserva. Consideran incluso que puede hacerles perder clientes.
Pero, si al reservar un hotel, un avión, un concierto, un espectáculo... estamos acostumbrados a adelantar el importe del mismo... ¿Por qué sería un problema implantarlo en Hostelería? Los restaurantes de la Galaxia Michelin llevan ya años haciéndolo, por lo que no debería ser un problema hacerlo en el común de la restauración. Estoy, estamos convencidos de que los clientes lo comprenderían.
MESAS VACÍAS-2
|nº 221 | mayo 2023
La gastronómica expresión “repetirse más que la morcilla” viene a pelo para este ejemplar de Ondojan.com en el que repetimos tema editorial volviendo a hablar del tantas veces comentado “No Show”, la práctica de no acudir a las reservas y no llamar para avisar de ello En el ejemplar anterior podría parecer que ya estaba todo dicho y lo acaecido con el restaurante Amelia y el notario bilbaíno podría hacer pensar que una noticia de tal calado podría afectar a la sociedad e ir atajando este problema.
Pues no. La realidad siempre supera a la ficción y la “culebra” realizada por un club de fútbol en una sidrería gipuzkoana donde habían reservado plaza para 44 y decidieron no acudir a última hora deja claro que nos encontramos ante una crisis de valores, una sociedad que no siente la más mínima empatía, que no muestra ningún respeto por sus semejantes.
Y es que no se trata tan solo de casos aislados o gentes que no se atreven a hacer una cancelación. En las capitales es muy habitual reservar en 3 ó 4 sitios y acudir a uno u otro en función de dónde se termine la juerga pre-cena. Igualmente, esa moda se ha extendido entre nosotros, y ya hay quien reserva con antelación el mismo día y a la misma hora en Getaria, Orio y Hondarribia, por poner tres ejemplos, porque no sabe dónde terminará yendo ese fin de semana. Eso sí, una vez decidido, no tienen la decencia de llamar a los lugares descartados, creando grandes problemas en dichos restaurantes que han adquirido más género del habitual o han movilizado extras para atender una demanda que finalmente no se da.
Lo sucedido en la sidrería Urbitarte roza el esperpento, pero es una buena muestra de lo necesario que es hacer una labor pedagógica al respecto para que la sociedad asuma lo feo de seguir por estos derroteros. Mientras tanto, los hosteleros tendrán que empezar a plantearse cobrar una señal por adelantado como los hoteles o como los aviones. Repetimos, al ser un ejemplar digital, las opiniones de cocineros y cocineras que recogimos en el número anterior y añadimos un artículo de “nuestra abogada”, Alazne Cano, al respecto. Asimismo ofrecemos la crónica del caso de la sidrería en un número de Ondojan con mucho morbo y barrillo complementado con una suculenta entrevista con el dicharachero y ácido Rafael García Santos... que ustedes lo disfruten !!
ESTUPIDO CONCIENZUDO
JOSEMA AZPEITIA
Coordinador de Ondojan.com